«Durante la construcción de la trama, empecé con dos personajes protagonistas, las hermanas Greta y Julieta, dos niñas pequeñas y, entonces, me llegaron a las manos diversos libros sobre Formentera, como leyendas y rondalles, y decidí ambientar la novela en la Isla, no solo por su belleza, también por su parte legendaria, que quería incluir».
La escritora explicó que «en las primeras páginas del libro, hay la desaparición de la hermana pequeña, cerca del mar, y este toma una fuerza muy especial en la historia». Aguilar detalló que «en el momento del trágico suceso, las dos se sentían cautivadas por la leyenda del rey Sigurd, un vikingo noruego que usurpó un tesoro a unos piratas en Formentera y que escondió», y añadió que «el mar es el símbolo de la muerte y el escenario clave de la novela».
De la relación entre Greta, su madre y su abuela, Aguilar asumió que «es complicada, está llena de silencios que han ido arrastrando a lo largo de los años y que nunca se han terminado de contar a viva voz». La escritora puntualizó que «la abuela Matilde es más afectuosa e intenta mantener los vínculos familiares, mientras que la hija, Helena, madre de la niña desaparecida, es una mujer marcada por la muerte de su hija», y completó que «Greta, protagonista de la historia, regresa a Formentera con 35 años e intenta buscar respuestas a lo que sucedió de niña».
Aguilar afirmó que «quería explicar que un mismo conflicto puede afectar de forma diferente a cada persona», y precisó que «todos podemos reescribir o reinterpretar nuestra historia, como indica la cita de Gabriel García Márquez que encabeza el libro, en la que se dice que la vida no es la que uno ha vivido, sino la que uno recuerda y cómo la recuerda». En ese sentido, la prosista señaló que «a veces, el relato que nos creamos sobre nosotros de lo que hemos vivido puede consolarnos, salvarnos o condenarnos», y destacó que «Tots els mars habla del poder reparador de las historias que nos podemos crear de nosotros mismos».
Profesora de narrativa, literatura infantil y cuento en el Ateneu Barcelonès, Aguilar es también guionista para el cine y la televisión, en series como Merlí, Infidels, El Príncipe o El cor de la ciutat, entre otras. «Tanto la novela como el guion es ficción y escritura, pero no tienen nada que ver, son géneros muy distintos», declaró la autora, quien expuso que «en la novela, cuentas con toda la elaboración del mundo interno de los personajes, así como el estilo y el lenguaje, que no es tan fácil en el guion, donde prima el ritmo y el conflicto desde las primeras escenas».
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