Horrach se mostró esperanzado porque puedan venir turistas en Semana Santa. "En los últimos meses nos vienen muchos más impactos positivos que negativos y tenemos que alegrarnos, pero quiero coger estas noticias con pinzas porque es complicado gestionar el turismo mezclado con la pandemia. Ahora sabemos que será muy escasa, muy limitada, pero al menos habrá un poco de Semana Santa", mencionó.
"En Semana Santa habrá dificultades para encontrar hoteles abiertos. De 60 hoteles de Alcúdia y 40 de Can Picafort, habrá dos en Alcúdia y uno en Can Picafort. El motivo es que no hay reservas suficientes para poder abrir. En un año normal tendría que haber en estos momentos un contingente de hoteles abiertos para el cicloturismo. Ahora estamos esperando a ver cómo se implementan las vacunas, si hay pasaporte sanitario, si hay vuelos suficientes para que vengan los turistas que nos dicen que tienen ganas de venir pero aún no se ha transformado en reservas. Y los hoteles vivimos de reservas", añadió.
Su pronóstico es de una temporada 2021 de cuatro meses, que se prolongue del 15 de junio al 15 de octubre y con una ocupación del 50%.
En estas circunstancias, muchos hoteles no abrirán, señaló, por lo que pidió que se prolonguen los ERTE hasta finales de año.
Asimismo, el hotelero considera positivas las ayudas directas a empresas que ha aprobado el Gobierno, aunque era más partidario de las rebajas de impuestos. "Pedimos desgravaciones y condonaciones de impuestos como el IBI. Tampoco no entendemos cómo no se ha eliminado el Impuesto sobre el Turismo Sostenible. La situación es muy grave, la continuidad de muchas empresas está en peligro y aún no vemos la luz al final del túnel", reclamó.
Finalmente, dibujó un escenario concreto de cambios que afectarán a los hoteles tras la pandemia en un entorno de apuesta por la sostenibilidad. "Los cambios giran en torno a la innovación y la digitalización. Tal vez se pierdan en el camino muchos turoperadores tradicionales. Se implementarán los check-in a distancia e incluso la elección de habitación desde el móvil. Habrá menos hoteles, menos restaurantes y menos oferta complementaria porque la magnitud de la crisis destruirá parte de la oferta. Cuando el turismo resurja no habrá la masificación a la que estábamos acostumbrados", concluyó, apostando porque una "cierta normalidad" llegará en 2023.