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Balears acogerá, cuando la Secretaria de Estado de Cooperación Internacional así lo decida, a entre 150 y 200 refugiados albano-kosovares que necesiten una atención especializada, es decir, niños, personas mayores y discapacitados, según afirmó ayer la consellera de Presidéncia, Rosa Estarás, al finalizar el acto constitutivo de la Comisión Interdepartamental en las Islas sobre Kosovo.

El hecho de que el operativo en las Islas se disponga para este perfil concreto de refugiado responde a la intención, ya anunciada por la UE, de ayudar a los refugiados en los países cercanos a Kosovo, (Macedonia y Albania), con objeto de favorecer su vuelta.

En un principio los refugiados no serán acogidos en casas particulares ya que se favorecería, según Estaras, «la ruptura de unidades familiares». Es por eso que sólo vendrán a las Islas aquellas personas que necesiten una atención especializada que será ofrecida en instituciones públicas.

Respecto a la ayuda a los refugiados «in situ», la comisión, compuesta por representantes autonómicos y miembros de ONG, abogó por la coordinación de tal forma que aconsejaron que las ayudas se tramiten a través de Cáritas, Cruz Roja y Unicef, que son tres organizaciones con experiencia en refugiados y presencia en la zona.