El Gobierno italiano convoca elecciones en la fecha que quería Silvio Berlusconi

La elección entre el 6 y el 13 de mayo se había convertido en la última batalla de la campaña preelectoral que se vive desde hace meses en Italia, con una pugna frontal entre el candidato progresista, Francesco Rutelli, partidario de la primera fecha, y Berlusconi a favor de la segunda. «Lo importante es que finalmente se vota, que se ha fijado la fecha y que los italianos volverán a las urnas el 13 de mayo para restablecer las reglas de una democracia herida», aseguró satisfecho Berlusconi, el gran favorito según los sondeos.

Las encuestas publicadas en los últimos meses dan una notable ventaja a la Casa de las Libertades (el Polo más la Liga Norte), en consonancia con sus triunfos en todas las elecciones parciales celebradas en Italia en los últimos dos años. El presidente de Forza Italia (FI) alegaba que votar el 13 de mayo convertía en ilegítima la candidatura de su rival debido a una cuestión de plazos sobre su dimisión como alcalde de Roma, pero limó asperezas en las últimas horas en espera de que, como ha sucedido, el Gobierno decidiese contentar a todos.

Rutelli, que también decidió bajar el tono de la polémica al decir que «la fecha que elija el Gobierno será la mejor», se limitó a asegurar que «ya lo sabía, sólo me lo han confirmado», cuando los periodistas le preguntaron su opinión sobre la decisión del Ejecutivo. Más que la fecha de las elecciones, el ex alcalde de Roma comentó las declaraciones de Amato, que aseguró que permanecerá a su lado aunque estudia no presentarse a las elecciones. «Me ha confirmado que formará parte de mi Gobierno cuando ganemos las elecciones», aseguró el candidato de la coalición progresista El Olivo.