La divisa estadounidense, que abrió la sesión con un precio de
venta de 2'30 pesos argentinos como promedio, fue perdiendo
posiciones a lo largo del día, y al cierre de la jornada del
mercado minorista terminó con un valor de venta de 2'10 pesos. Ese
precio se aproxima a los 2'05 pesos con los que cerró el viernes 1
de febrero, la última jornada en el mercado de divisas, previa a la
suspensión de las operaciones cambiarias que estuvo vigente durante
la semana pasada. Desde 1991 y hasta el pasado 6 de enero, el dólar
y el peso argentino se cotizaron a la par, pero después comenzó a
regir un sistema dual con un cambio oficial de 1'40 pesos para el
comercio exterior y un mercado libre para el resto de las
transacciones.
Al debutar ayer el mercado único y libre, existía expectación
sobre la posibilidad de que el precio del dólar se disparara en
Argentina, lo que hacía temer el peligro de la hiperinflación que
se vivió en los años ochenta. Sin embargo, al cierre de la sesión
el precio de la divisa estadounidense se mantuvo en niveles
parecidos a los de la última sesión, y aunque había comenzado la
jornada con un precio alto, a partir del mediodía el dólar comenzó
a perder posiciones. Fuentes del mercado de divisas no pudieron
confirmar la posibilidad de que haya habido intervenciones del
Banco Central para controlar el precio del dólar.
Por contra, el principal indicador de la Bolsa de Comercio de
Buenos Aires cayó anoche un 10'67%, el día de estreno del mercado
libre de divisas. Un analista dijo que la corriente de ventas fue
alimentada por los particulares que compraron acciones en las
últimas semanas para cubrirse de una temida espiral alcistas en el
valor del dólar estadounidense, que finalmente no se produjo. Con
la bajada del 10'67 por ciento, el índice Merval, que mide la
evolución de las acciones líderes, quedó en los 408'69 puntos. El
analista bursátil explicó que el mercado esperaba en el debut del
nuevo esquema de cambios un dólar a un valor de alrededor de 2'50
pesos. Quienes habían decidido buscar refugio en la Bolsa ante el
temor de una mayor depreciación optaron por cambiar de posición y
se desprendieron de sus papeles, lo cual se reflejó en la fuerte
caída del Merval, añadió.
Mientras, el Gobierno argentino pidió ayer una tregua de precios
de 15 días que ayude a que el mercado de cambios se estabilice,
según informó el director de Comercio Interior, Silvio Peits.
Personal de supermercados, fabricantes de alimentos y directivos de
laboratorios medicinales fueron citados ayer en la Casa de
Gobierno, donde mantuvieron reuniones con varios funcionarios de la
Administración del presidente peronista Eduardo Duhalde. Las
reuniones coincidieron con la entrada en vigor de dos decretos para
frenar la creciente ola de despidos en el país.
Los argentinos vivieron la jornada de ayer con indignación. Una
hora antes de la apertura del horario bancario, largas colas de
ahorradores se advertían frente a las casas de cambio del centro
financiero de Buenos Aires en lo que constituye el primer día de
liberación total del dólar. Los ahorradores comenzaron a
congregarse en las calles del centro de la capital argentina para
lograr un lugar en las colas instaladas frente a las casas de
cambio, únicos lugares permitidos para vender dólares. Por su
parte, diversas agrupaciones de desocupados y 'piqueteros'
argentinos, que reclaman al Ejecutivo de Eduardo Duhalde ayuda y
puestos de trabajo, cortaron los principales accesos a la ciudad de
Buenos Aires, lo que provocó el caos en la capital.
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