El proyecto de declaración final de la cumbre árabe, que se
celebrará el mañana y el jueves próximos en Beirut rechaza
categóricamente el asentamiento de los refugiados palestinos en los
países de acogida. «Israel es jurídicamente responsable del
problema de los refugiados palestinos y nosotros (los dirigentes
árabes) rechazamos totalmente los proyectos de solución, los planes
y los intentos para que se asienten fuera de su tierra», señala el
texto.
En el proyecto, se afirma «la necesidad de asegurar el derecho
al regreso de los refugiados palestinos en base a las resoluciones
internacionales, en particular la resolución 194» de la Asamblea
General de la ONU. El derecho al regreso, no mencionado
inicialmente en la iniciativa de paz saudí, sigue siendo el
principal punto de desacuerdo entre los Estados árabes. Para países
como Arabia Saudí, Jordania y Egipto, la oferta saudí es un marco
general de paz que permitirá más tarde a cada país negociar las
cuestiones relacionadas con su soberanía.
El presidente libanés, Emile Lahud, que presidirá la cumbre
árabe de Beirut, afirmó en la jornada de ayer que su país no
aceptaría una resolución del conflicto entre israelíes y árabes que
no garantice el regreso de los refugiados palestinos.
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