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JULIO DE LA GUARDIA-JERUSALÉN Un tribunal militar palestino sentenció ayer a los cuatro presuntos asesinos del ministro israelí de Turismo Rejavam Zeevi a penas de entre uno y 18 años de cárcel, cumpliendo así una de las condiciones impuestas por Ariel Sharon para levantar el estado de sitio impuesto sobre el complejo de oficinas de Yaser Arafat. No satisfecho, Sharon exigió ayer su extradición a Israel para que sean juzgados ante un tribunal hebreo.

El anuncio de las sentencias coincidía con el final de la visita el coordinador de la política exterior europea, Javier Solana, quien como colofón se reunía con el primer ministro israelí en Jerusalén, pese a que el miércoles se negó a recibirle. Entre tanto, doce ciudadanos palestinos fallecieron ayer en diferentes incidentes ocurridos en Cisjordania y la Franja de Gaza. Un tribunal castrense palestino sentenció a cuatro de los culpables del asesinato del ministro israelí de turismo a penas de privación de libertad y trabajos físicos de entre un año "la pena más leve" y dieciocho "la máxima". Los otros dos presuntos culpables fueron anteriormente arrestados por los servicios de seguridad israelíes y están detenidos en el Estado hebreo.

El procesamiento de estos cuatro activistas del Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) fue una las principales reivindicaciones hechas por el Gobierno israelí a la Autoridad Nacional Palestina desde el pasado 17 de octubre, en que tuvo lugar el asesinato. Desde que el Ejército israelí sitiara el complejo de oficinas de Yaser Arafat en Ramala, se ha convertido en un requisito 'sine qua non' para poner fin al asedio del 'Mukata' y levantar el toque de queda impuesto en los barrios que lo rodean.

No obstante, Ariel Sharon aseguró ayer que no está dispuesto a aceptar el resultado de este juicio, y solicitó la extradición de los condenados. «Israel demanda que extraditen a los asesinos del ministro Zeevi y a Fuad Shubaki, quien está detrás de los lazos entre Irán y la Autoridad Nacional Palestina, y es responsable junto a Arafat de financiar los gastos de los atentados suicidas», declaró Sharon.