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EFE-DOHA
Una soldado estadounidense capturado por las tropas iraquíes ha sido rescatado de un hospital iraquí por las fuerzas aliadas, informó ayer el Mando Central de las fuerzas norteamericanas. El general Vincent Brooks leyó un escueto comunicado en el que señaló que el soldado volvió a su unidad en la zona controlada por las fuerzas de la coalición, sin dar su identidad. Sin embargo, poco después su familia confirmó que se trataba de Jessica Lynch, una joven de 19 años.

Desde que estalló el conflicto en Irak el pasado 19 de marzo, siete soldados estadounidenses han sido capturados por las fuerzas iraquíes. De los siete prisioneros, cinco cayeron en manos iraquíes el 23 de marzo en una emboscada cerca de la ciudad de Nasiriya y formaban parte de la 507 Compañía de Mantenimiento. Los otros dos son los pilotos de un helicóptero de ataque Apache capturados el 24 de marzo tras una misión en las cercanías de la ciudad de Kerbala.

En Doha, el general Brooks tampoco explicó cuándo se produjo el rescate o cuáles fueron sus detalles, pero se filtró que la información la facilitó la CIA, que en coordinación con un cuerpo de élite del Ejército norteamericano, realizaron la espectacular operación.

La familia de la soldado rescatada lo celebraba ayer: «No creerán la alegría, llantos, cantos, abrazos, gritos» que estallaron con la noticia, dijo Pam Nicolais, prima de Lynch. «Dijeron que iba a ser la mayor fiesta que esta cuadra jamás haya visto», dijo Sherri McFee, otra prima. «Todos estaban muy preocupados (...) pero todos mantuvimos la esperanza de que regresaría a casa».

Según el periódico, Lynch esperaba convertirse en maestra y se unió al Ejército para obtener educación. Su hermano también integra las fuerzas. No está claro cuándo Lynch, originaria de Palestine, West Virginia, regresará a casa, dijo su padre al USA Today.