TW
0

El primer ministro británico, Tony Blair, no será acusado en el informe sobre los fallos de los servicios secretos en relación con las supuestas armas de destrucción masiva de Irak, publicó ayer el dominical «The Sunday Telegraph». No obstante, el jefe de los consejeros políticos de Blair, Jonathan Powell, puede ser la víctima principal del documento que dará a conocer Lord Butler de Brockwell el próximo miércoles.

Al parecer, Butler se centró en un correo electrónico enviado por Powell al presidente del Comité Conjunto de Inteligencia, John Scarlett, el 19 de septiembre de 2002, días antes de que el Gobierno publicara un informe sobre la amenaza que suponía Sadam Husein. Powell pidió que una parte del informe sobre las armas fuera redactado otra vez porque mostraba al ex dictador como una amenaza sólo si era atacado por las fuerzas de la coalición y no ponía énfasis en el peligro de que Irak pudiera utilizar armas químicas o biológica en un ataque no provocado.

Otros dominicales británicos tienen otras opiniones sobre el contenido del informe Butler.

Según «The Sunday Times», lord Butler criticará a la residencia de Downing Street y al Comité Conjunto de Inteligencia por el mal uso político de los datos de inteligencia a fin de justificar la guerra contra Irak, que empezó en marzo de 2003. Blair -agrega será criticado por exagerar las pruebas de los servicios secretos de que Irak tenía armas de destrucción masiva.