Las fuerzas iraquíes y de EEUU aceleraron su campaña contra la
insurgencia y dieron muerte al menos a 85 presuntos rebeldes en una
nueva operación cerca de Tikrit, ciudad natal de Sadam Husein,
según informaron ayer en un comunicado.
Un comunicado difundido por el Centro de Coordinación Militar,
explica que el ataque comenzó ayer, martes, y duró hasta la
madrugada de hoy en la zona de Al Helwa, al suroeste de dicha
ciudad.
Esta cifra eleva a más de 120 el número de presuntos insurgentes
muertos en los últimos tres días en enfrentamientos con soldados
iraquíes y norteamericanos en áreas suníes situadas en el centro y
el norte de Irak.
La nueva operación, en la que fallecieron siete uniformados
iraquíes y otros seis resultaron heridos, fue lanzada por fuerzas
especiales iraquíes, apoyadas por tropas de EEUU, contra un
supuesto campo de entrenamiento ilegal cerca de Tikrit, a unos 200
kilómetros al norte de Bagdad.
«En ese área hubo una batalla que duró 17 horas y terminó con la
muerte de al menos 85 hombres armados», añade la nota, que no
informa sobre posibles bajas entre los soldados
estadounidenses.
El ataque llevado a cabo cerca de Tikrit se produjo menos de 24
horas después de la muerte de diecisiete presuntos insurgentes en
una campaña de la misma fuerza especial iraquí «Maghauir»
(valientes) en una zona cercana a la ciudad septentrional de
Mosul.
Un comunicado similar indicaba el martes que esa campaña fue
llevada a cabo en aldeas ubicadas entre las ciudades de Tal Afar y
Mosul, (400 kilómetros al norte de la capital), tras recibir
información sobre la presencia en esa zona de numerosos grupos
armados.
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