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Los periodistas rumanos Marie Jeanne Ion, Sorin Miscoci y Eduard Ovidiu Ohanesian, liberados de su secuestro en Irak, fueron recibidos ayer por el presidente del país, Traian Basescu, a su llegada al aeropuerto militar de Bucarest. Según la embajada estadounidense, no les acompañó su guía estadounidense de origen iraquí y secuestrado con ellos, Mohamed Munaf, porque está siendo investigado por las fuerzas de la coalición en Irak.

Varias decenas de personas, entre familiares, autoridades y representantes de la prensa, acogieron a los informadores como héroes para celebrar el feliz desenlace de la crisis, iniciada el pasado 28 de marzo y que sacudió al país. Los tres salieron corriendo del avión, en aparente buen estado físico.