Fue entonces cuando el líder de Al Fatah y presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abbas, y el líder en el exilio de Hamás, Jaled Meshaal, sellaron en La Meca en presencia del Rey Abdullah de Arabia Saudí el pacto que acabó con meses de enfrentamientos entre ambas fuerzas. Dicho acuerdo establecía los principios para formar un gobierno de coalición entre las partes, y en el mismo se incluyó la promesa de que respetar los acuerdos previos de paz firmados con Israel y se repartió entre ambos partidos los puestos del gabinete de Gobierno palestino.
Con este trámite se da el primer paso para materializar el acuerdo que hace una semana firmaron en La Meca Hamás y Al Fatah poniendo así fin a varios meses de duros enfrentamientos armados entre las dos facciones palestinas.
Haniyeh presentó su carta de dimisión al presidente palestino, con quien Hamás tendrá ahora que impulsar la creación de un Ejecutivo de unidad nacional, poco antes de que Abbas autorizara a Haniyeh a formar un nuevo Gobierno de coalición. La dimisión del primer ministro palestino, de Hamás, y de todo su gabinete es una formalidad necesaria para la formación de ese Gobierno de unidad nacional que se acordó el jueves pasado.
Así, Hamás tendrá nueve ministerios, Al Fatah controlará seis, y las otras cuatro carteras se repartirán entre los restantes partidos palestinos. En principio el actual primer ministro palestino, Ismail Haniyeh, permanecerá al frente del Ejecutivo, mientras que el candidato que ostente la cartera del Interior, al frente de las fuerzas de seguridad del Estado, deberá ocuparla un candidato independiente cuyo nombramiento deberá ser propuesto por Haniyeh y posteriormente ratificado por Abbas.
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