El ministro de Defensa iraquí sostiene un arma en Basora, ayer durante una operación contra los rebeldes. Foto: EFE

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AGENCIAS-BAGDAD

El director de la oficina del clérigo chií Muqtada al Sadr en Nayaf (sur de Irak), el jeque Riad al Nuri, fue asesinado ayer por un grupo de desconocidos, informaron fuentes policiales. Los presuntos asesinos, que escaparon del lugar del crimen, tendieron una emboscada a Nuri en su casa, en el este de esta ciudad santa chií, y dispararon contra el asesor de Sadr, que murió al instante.

Las autoridades decretaron el toque de queda indefinido tras el asesinato de este importante clérigo chií en Nayaf, a 170 kilómetros al sur de Bagdad. Los «sadristas» acusaron inmediatamente al Gobierno de Nuri al Maliki de estar detrás del asesinato.

«Señalamos al Gobierno como responsable de su asesinato», dijo Haider Nateq, portavoz «sadrista» en la ciudad meridional de Diwaniya, en declaraciones al canal de noticias Al Yazira.

«El asesinato es parte de una campaña que pretende debilitar a los 'sadristas'», agregó Nateq. Nayaf es la ciudad más sagrada en la tradición chií y en ella residen los más importantes clérigos de esta rama del islam en Irak, incluido el ayatolá Ali Sistani, máxima autoridad chií del país.

La oficina de Sadr en la ciudad está situada en las inmediaciones del mausoleo de Ali, primo y yerno del profeta Mahoma, y ya fue objeto de un ataque por parte de las fuerzas de EEUU en 2004.

Las autoridades temen que el asesinato de ayer desate una ola de violencia inter-chií similar a la que ha azotado las ciudades del sur de Irak recientemente.

Al menos tres civiles murieron ayer, y cinco resultaron heridos, tras impactar un misil en la segunda planta del Hotel Palestina, en Bagdad, según informó un responsable del Ministerio del Interior iraquí, citado por la CNN. El hotel, situado al otro lado del río Tigris frente a la Zona Verde, donde se ubica la Embajada estadounidense y parte de las instituciones iraquíes, fue en el que murió el cámara español José Couso y en él se siguen alojando numerosos periodistas extranjeros.

El Ejército estadounidense ha responsabilizado de los recientes ataques con misiles en Bagdad y la Zona Verde a los milicianos chiíes apoyados por Irán. La Embajada estadounidense en Bagdad declaró que no hubo ningún ataque ayer en el distrito, formalmente llamado la Zona Internacional, según la CNN.