TW
0

OTTR/PRESS-WASHINGTON
El presidente estadounidense, George W. Bush, ha hallado su 'fórmula' particular para combatir el continuo aumento en los precios del petróleo. El inquilino de la Casa Blanca pidió ayer al Congreso que permita iniciar las extracciones de fuel en mar abierto, al tiempo que reiteró su defensa de comenzar la prospección en la Reserva Nacional Artica de Vida Animal de Alaska. De esta forma, Bush argumentó que se aumentaría la producción gracias a unos trabajos que el incremento de los precios del crudo ha terminado por convertir en rentables.

Una nueva ley
Para hacer efectiva la medida, el Congreso deberá aprobar una ley y derogar una prohibición vigente desde 1981 que impide realizar perforaciones petrolíferas en algunas áreas del litoral del país.

«No hay excusa para el retraso», defendió el presidente en una comparecencia pública, en la que también renovó su petición de comenzar las excavaciones en un área de alto valor ecológico en Alaska, calificado de Reserva Nacional.

Bush alegó que los pozos contienen tres veces más fuel que las reservas probadas en Arabia Saudí, añadiendo que los últimos repuntes del precio del barril de crudo han convertido en rentables unas labores en las que hasta ahora no salían las cuentas.

A su juicio, «el Congreso debe afrontar una dura realidad a no ser que sus miembros estén dispuestos a aceptar unos precios del combustible a los dolorosos niveles actuales o incluso superiores». «Nuestro país debe producir más petróleo y debemos comenzar ahora», afirmó Bush, cuyas estimaciones cifran en 18.000 millones de barriles las potenciales extracciones de la plataforma continental externa.