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OTR/PRESS-KABUL Kabul sufrió ayer el atentado más mortífero de los últimos meses. Un terrorista hizo explotar el coche en el que viajaba al paso de dos vehículos diplomáticos que en ese momento entraban en el recinto de la Embajada de la India de la capital afgana. Como consecuencia de la deflagración, al menos 41 personas murieron y en torno a 140 resultaron heridas, si bien el caos en que se transformó la zona ni siquiera permitía a las autoridades contar las víctimas o identificarlas. Desde Nueva Delhi, se condenó inmediatamente la masacre y se anunció el envío de una delegación de primer nivel para colaborar en las investigaciones.

El suicida actuó en las inmediaciones del consulado indio y su acción terminó por convertirse en la mayor masacre ocurrida en Kabul desde que el pasado septiembre una treintena de personas perecieran en un ataque contra un autobús militar. Ayer, las escenas de caos volvieron a repetirse, en esta ocasión cerca de un edificio diplomático, al que trataban de acceder dos vehículos cuando el terrorista hizo explotar el coche-comba. La magnitud de la deflagración destruyó por completo los vehículos que se habían convertido en objetivo, pero también afectó a toda la zona y, particularmente, a las personas que se encontraban allí.

Las autoridades informaron de los daños personales producidos para perfilar un balance de «41 mártires», según un alto responsable policial. Asimismo, el portavoz del Ministerio de Sanidad afgano, Abdullah Fahim, señaló la existencia de 141 heridos, aunque las cifras bailaban y no se descartaba que se ampliase la cifra de fallecidos. No en vano, la explosión pudo sentirse prácticamente en toda la ciudad y aún horas después de ocurrir las hileras de cadáveres ocupaban los aledaños de la Embajada, como ejemplo de un panorama desolador.

En cuanto a la autoría del atentado, el Ministerio de Interior de Afganistán aseguró que fue llevado a cabo «en coordinación y consulta con un activo servicio de Inteligencia de la región», según un comunicado. «Afganistán ha acusado en reiteradas ocasiones a agentes paquistaníes de estar involucrados en atentados perpetrados contra su territorio», indicó la nota. El Ministerio de Asuntos Exteriores indio ya ha anticipado el envío de una delegación de primer nivel para ayudar en las investigaciones.

El Gobierno indio condenó en un comunicado «enérgicamente» la acción terrorista contra su «misión diplomático en Afganistán».