Un soldado norcoreano vigila con sus prismáticos la línea de demarcación militar, en la zona desmilitarizada que separa las dos Coreas. | Efe

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El régimen comunista de Corea del Norte amenazó ayer con utilizar su poder nuclear en una 'guerra santa' contra el masivo despliegue militar previsto a partir de hoy, domingo, en el mar de Japón (mar del Este) por EEUU y Corea del Sur.

Los dos aliados desarrollarán cuatro días de maniobras aéreas y navales lideradas por el portaaviones nuclear estadounidense George Washington, en las que participarán una veintena de buques de guerra, 200 cazas de combate y 8.000 efectivos.

Pese a que insisten en su carácter defensivo, Washington y Seúl confiesan que el objetivo de esos ejercicios militares es enviar un «mensaje disuasorio» al régimen de Kim Jong-il tras el hundimiento en marzo de la corbeta surcoreana Cheonan, que causó 46 muertos.

Naufragio

Las maniobras fueron planeadas poco después de que una investigación internacional auspiciada por Seúl concluyese en mayo que ese naufragio, ocurrido cerca de la frontera marítima entre las dos Coreas, fue obra de un ataque norcoreano.

Seúl, Washington y Tokio, que participará por primera vez como observador en los ejercicios militares, atribuyen ese suceso a un torpedo de un submarino norcoreano, pero el régimen comunista de Pyongyang ha negado en todo momento su responsabilidad.

China, principal valedor internacional de Corea del Norte, ha evitado condenar el hundimiento del buque, ha criticado los ejercicios militares de EEUU y Corea del Sur, y ha pedido «contención» a los implicados con el objetivo de rebajar la tensión.

El hundimiento del Cheonan no ha hecho más que incrementar las tensiones en la siempre inestable península coreana y, como suele ocurrir cuando hay planeados ejercicios militares de Corea del Sur, Pyongyang emitió ayer duras amenazas, por tercer día consecutivo.

La Comisión Nacional de Defensa norcoreana, el poderoso órgano militar que preside Kim Jong-il, afirmó ayer, en un comunicado recogido por la agencia oficial KCNA, que «el Ejército y el pueblo de Corea del Norte contraatacarán, de forma legítima, con su poder disuasorio nuclear» ante esas maniobras.

Seúl y Washington «amenazan este territorio con una guerra nuclear bajo el pretexto» de responder al naufragio de la corbeta y por ello Pyongyang está legitimado para «comenzar una guerra santa de represalia basada en su poder disuasorio nuclear», según la KCNA.