«Quiero aprovechar esta oportunidad para declarar una amnistía para todos los que han tomado las armas contra Sudán», afirmó Kiir poco después de tomar posesión oficial como presidente del recién creado Estado de Sudán del Sur.
Corrupción
Hay al menos siete grupos armados activos en distintas zonas de Sudán de Sudán, muchos de ellos embarcados en una lucha contra la corrupción de la que responsabilizan a la administración sursudanesa. Así, Kiir se comprometió a combatir el «cáncer de la corrupción».
En cuanto a las regiones fronterizas, Kiir reiteró su compromiso con sus poblaciones. «Quiero garantizar a la gente de Abyei, Darfur, Nilo Azul y Kordofán del Sur que no os hemos olvidado. Cuando lloráis, lloramos. Cuando sangráis, sangramos. Hoy os prometo que hallaremos una paz justa para todos», aseguró.
Kiir mencionó expresamente al presidente sudanés, Omar Hassan al Bashir, como socio con el que deberá trabajar para lograr estos objetivos y lograr una solución definitiva al conflicto.
Todsa estas regiones se encuentran en la frontera entre ambos países, aún por definir, y cada una de ellas podría ser el origen de un estallido de violencia pese a la secesión acordada.
Regiones en disputa
En concreto, Abyei es una región fértil y con reservas de petróleo que reivindican ambas partes. Darfur, por su parte, ha sido el escenario de una guerra de ocho años entre milicias antigubernamentales y el Ejército apoyado por paramilitares.
Kordofán del Sur y Nilo Azul están en el norte de Sudán, pero en ellas viven minorías que apoyaron a Sur de Sudán durante la guerra civil. Por ultimo, Kordofán del Sur ha sido el escenario de la violencia más reciente, protagonizada por grupos armados enfrentados a las fuerzas militares norsudanesas.
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