La Policía alemana confirmó ayer que se produjo un incidente en los accesos a la catedral de Erfurt (este de Alemania) unas dos horas antes del inicio de la misa de Benedicto XVI, en el que un desconocido disparó al menos tres balines con un arma de aire comprimido, sin que se produjeran heridos.
El incidente ocurrió sobre las 05.00 GMT, dos horas antes del inicio del oficio religioso, que no se ha visto alterado y al que han asistido unos 30.000 fieles.
Anteriormente, la cadena de televisión pública regional MDR había informado de que un guardia de seguridad había resultado herido. Sin embargo, según la policía, no hubo heridos, pero una de las empleadas de los servicios de seguridad encontró un proyectil de un arma de aire comprimido en el pantalón.
A la fuga
El presunto agresor no ha sido detenido, contrariamente a lo que informó esa cadena.
Los hechos ocurrieron en uno de los controles de seguridad para acceder al amplio recinto que rodea a la catedral, a unos 100 metros de la plaza donde se encuentra el templo.
El oficio religioso discurrió sin el menor contratiempo, aunque se reforzaron los dispositivos de seguridad en torno al recinto.
Ante varios 30.000 fieles reunidos en la plaza de la catedral de esta ciudad de 200.000 habitantes, en el estado de Turingia, uno de los menos religiosos de Alemania, el Papa dio gracias a Dios por los cambios registrados en el país.
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