Alepo es una ciudad totalmente destruida por las bombas del Ejército del presidente Bachar al Asad. | ZOHRA BENSEMRA

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La ofensiva a gran escala que lanzaron el miércoles las fuerzas gubernamentales sirias obligó ayer a los rebeldes a replegarse dentro del estratégico barrio de Salahedin, en Alepo, donde continúa una fiera batalla por el control de la ciudad. Los medios oficiales sirios señalaron que las tropas retomaron el control sobre la citada barriada, así como sobre otros vecindarios de Alepo como Asila, Bab el Nasr y Jan el Uazir, y expulsaron a los «grupos terroristas».

Sin embargo, los alzados aseguran que continúan en sus calles, replegados a la espera de que entren los militares para tender emboscadas. «Ante los fuertes bombardeos del régimen sobre Salahedin, con cohetes que abren agujeros de tres metros de diámetro y han destruido muchos edificios, los combatientes se retiraron hacia el interior en una maniobra táctica para crear enclaves de resistencia», dijo a Efe el número dos del Ejército Libre Sirio (ELS), Malek Kurdi.

Carros de combate rusos

El lugarteniente de los rebeldes agregó que el Ejército utiliza carros de combate clase T-82 de fabricación rusa, frente a los cuales los lanzagranadas tipo RPG del mal armado ELS tienen poca efectividad.

Precisamente, una activista en esa misma ciudad, Wed al Hayat, señaló por teléfono que la razón del repliegue se debe a la escasez de municiones y armamento para hacer frente a las fuerzas del régimen de Bachar al Asad.

«Hay pocas brigadas del Ejército Libre Sirio (en Salahedín) y los bombardeos son muy intensos», agregó Al Hayat, que destacó la presencia de un alto número de francotiradores en la zona.

En el plano político, el presidente Al Asad designó ayer un nuevo primer ministro, tras la deserción esta semana del anterior, Riad Hiyab. El nuevo jefe de Gobierno es Wael al Halqi, hasta ahora titular de Sanidad, aunque su cargo tiene más importancia representativa que real, ya que las riendas del país se llevan desde el Palacio Presidencial. El nombramiento de Al Halqi se produce un día después de que Jordania confirmara que Hiyab había llegado a territorio jordano huyendo del régimen.