Fotografía distribuida por la agencia de noticias oficial siria SANA que muestra el escenario de la explosión de un coche bomba en el centro de Damasco. | SANA

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Más de 60 personas murieron hoy y más de 200 resultaron heridas en un atentado con coche bomba perpetrado por un supuesto suicida en el centro de Damasco, según la última cifra de víctimas difundida por la televisión siria.

La explosión se registró en la plaza Shahbandar del barrio damasceno de Al Mazra, cerca de una sede del partido gubernamental Baaz, una escuela y una estación de autobuses, informaron a Efe fuentes oficiales.

Muchos de los heridos se hallan en estado grave, por lo que dichas fuentes no descartaron que la cifra de fallecidos pueda aumentar en las próximas horas.

Entre los heridos figuran estudiantes y otros civiles que se encontraban en ese momento en esa zona de la capital, que está dénsamente poblada.

También resultó herido, pero de carácter leve, el secretario general del Frente Democrático para la Liberación de Palestina, Nayef Hawatmeh, que respalda al régimen sirio, según dijeron a Efe fuentes de este movimiento.

El estallido del coche bomba produjo, además, grandes daños materiales y decenas de vehículos aparcados en las proximidades quedaron calcinados.

La agencia oficial de noticias Sana atribuyó la acción a grupos «terroristas», expresión con la que las autoridades sirias denominan a los rebeldes que combaten contra el régimen que preside Bachar al Asad.

Además de esa explosión, dos proyectiles de mortero impactaron hoy contra la sede del Estado Mayor de la Defensa y de la Comandancia General del Ejército en la céntrica plaza de los Omeya, sin causar víctimas mortales.

El edificio se encuentra en proceso de restauración tras haber sido objetivo de dos ataques en septiembre del año pasado.

Mientras, en el suburbio damasceno de Barze estallaron otros dos coches bomba cerca de edificios de seguridad, aunque hasta ahora se desconoce si hay víctimas, indicó en un comunicado el Observatorio Siria de Derechos Humanos.

Estos ataques se producen después de que varios proyectiles impactaran en los últimos días en la capital, en particular en la ciudad deportiva de Tishrin, donde causó la muerte de un futbolista, y junto a uno de los palacios presidenciales de Al Asad.