Vista de la morgue del Hospital Charles Nicole, donde se encuentran los cuerpos sin vida del matrimonio barcelonés que falleció en el ataque de este miércoles cometido por un comando yihadista en el corazón de la capital tunecina. | Javier Lizón

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El Estado Islámico (EI) ha reivindicado este jueves mediante una grabación que han difundido en internet su autoría en relación al ataque terrorista que un día antes causó el pánico en la capital de Túnez.

Además, se ha conocido que el matrimonio de jubilados formado por Antoni Cirera Pérez, de 75 años y Dolors Sánchez Rami, de 73, asesinados durante la acción terrorista, había contratado el crucero turístico por el Mediterráneo «para celebrar sus bodas de oro», han explicado los vecinos de los fallecidos.

El Ayuntamiento tarraconense de Alcanar ha seguido este mediodía un minuto de silencio en solidaridad con su aparejador municipal, Agustí Cirera, hijo del matrimonio asesinado, que viajaba en un crucero de la compañía MSC.

Al minuto de silencio ha asistido buena parte de la corporación municipal, y también muchos miembros de la brigada, con quien el aparejador mantenía mucho contacto diario, además de vecinos.

Por respeto a la familia, los miembros del gobierno municipal han declinado hacer declaraciones.

Según los vecinos que viven en el mismo inmueble que la pareja, en la calle Conca del barrio del Camp de l'Arpa de Barcelona, el matrimonio había contratado el crucero turístico a bordo del MSC Splendida, que les llevó a Marsella, Génova, Roma, Palermo y Túnez, para celebrar sus 50 años de casados.

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Los vecinos han expresado su consternación por el suceso y han ensalzado las virtudes y bondades del matrimonio asesinado, cuya hija Maria Gràcia se encuentra «muy afectada» y ha declinado hacer declaraciones a la prensa.

Loli, la propietaria de la pescadería en la que el matrimonio acostumbraba a comprar, ha explicado que «a ella le hacía mucha ilusión este viaje, pero a él no le hacía tanta gracia pero iba para satisfacerla a ella».

El matrimonio, que tiene dos hijos y un nieto que vive con ellos porque está estudiando en Barcelona, «eran buenos clientes, gente muy sencilla, les gustaba ir a pescar y a la montaña», ha explicado Loli.

Ha reconocido que la tragedia les «ha cogido por sorpresa, es una noticia muy triste».

«Era un viaje para celebrarlo, no para que acabe así», ha concluido la vendedora de pescado.

Esta mañana, Agustí, hijo del matrimonio se ha desplazado a Túnez para hacerse cargo de los restos de sus padres.