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Un hombre fue detenido este jueves por su presunta responsabilidad en la muerte de la joven Paola Ramírez, asesinada en medio de una protesta que se tornó violenta en el estado de Táchira (oeste de Venezuela), informó el Ministerio Público (MP, Fiscalía).

La fuente indicó, en un comunicado, que Iván Pernía, de 31 años, será imputado en las próximas horas por delitos contemplados en la legislación local.

Con anterioridad, el gobernador de Táchira, el chavista José Gregorio Vielma Mora, señaló que el detenido es un «militante de oposición» que «abrió fuego desde su apartamento contra un grupo de motorizados que circulaba por la calle y causó la muerte de esta joven, quien se encontraba transitando por la zona».

El gobernador, según una nota de su departamento, aseguró que se realizaron pruebas de balística «concluyentes» y responsabilizó de los hechos a «líderes opositores» que, denunció, hacen llamamientos a la violencia.

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Por su parte, el defensor del pueblo venezolano, Tarek William Saab, reiteró dicha hipótesis sobre el móvil del crimen y explicó que el presunto homicida se declaró «confeso» y está detenido en un calabozo de la policía científica en esa región de los Andes venezolanos.

Algunas de las protestas de este pasado miércoles que fueron convocadas por la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) degeneraron en violencia y se saldaron con tres fallecidos en Caracas, Táchira y en el estado de Miranda (centro del país).

Estas tres personas perdieron la vida a causa de disparos y, aunque no han sido identificados los autores de los hechos, la información preliminar indica que dos de ellos no participaban en las manifestaciones.

Las movilizaciones se produjeron cuando se cumplen casi tres semanas de protestas antigubernamentales en la calle que, con los últimos datos de hoy, arrojan un balance de al menos nueve muertos -entre ellos dos efectivos de la fuerza pública- y alrededor de mil detenidos.