Un trabajador se cubre con una mascarilla. | Reuters

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Por su facilidad de transmitirse en una comunidad, a lo que más se parece hasta el momento el coronavirus de Wuhan es al virus de la gripe A, originado en 2009, y aunque hay que estar en alerta «no tiene que surgir el pánico» ni se debe de dar ninguna situación de alarma.

Lo han asegurado varios expertos que han participado este lunes en el Foro organizado por la Asociación Nacional de Informadores de la Salud (ANIS) sobre «Toda la verdad sobre el coronavirus», en el que la directora general de Salud Pública del Ministerio de Sanidad, Pilar Aparicio, ha abundado en que una de las preocupaciones es que el virus «se instale entre nosotros».

El número de casos, las comunidades autónomas afectadas, la situación en Italia -un país tan cercano a España- los casos en los que no se puede encontrar un vínculo claro de la infección, así como aquellas personas que están graves son también las principales preocupaciones del Ministerio, ha dicho Aparicio.

Ha señalado que la medida acordada entre Sanidad y las comunidades autónomas para hacer pruebas de coronavirus a los casos de infecciones respiratorias graves -como neumonía- con origen desconocido ha permitido detectar varios casos y ha indicado que se está estudiando la posibilidad de hacérsela también a aquellos pacientes con un cuadro clínico no tan severo.

«Es una de las medidas que se están planteando, lo ha planteado también ya nuestro portavoz, Fernando Simón, y estamos discutiéndolo, tenemos varias reuniones a lo largo del día iremos viendo esas definiciones», ha dicho la directora de Salud Pública a los medios.

Al ser un virus nuevo, hay aún preguntas sin respuesta cómo cuál es el tratamiento más eficaz para combatir la COVID-19 -antivirales, suero de paciente curado etc- o si el fin del virus podría venir con la llegada del buen tiempo.

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Hasta ahora, por cómo se está expandiendo el virus, «por la facilidad» que tiene para transmitirse en una comunidad a lo que más se parece es, según el virólogo y director del área de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad de Burgos, Juan Ayllón, es al de la gripe A, de 2009.

«Aunque son virus completamente distintos, un coronavirus y un virus de la gripe son como peras y manzanas, pero las dos acaban siendo frutas, y clínicamente también presenta muchas similitudes con lo que sería una gripe», ha considerado Ayllón.
Ayllón, especialista en virus de la gripe, ha insistido: «Si me tuviera que quedar con un ejemplo de a qué se parece a esto más, sería lo que vimos en 2009».

El exasesor de la dirección de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y miembro del comité científico de ANIS, Daniel López, por su parte, ha insistido, al igual que el resto de expertos que han participado en el foro, que lo más importante hasta el momento es que los casos positivos estén debidamente aislados, porque al no haber tratamiento la única medida es la contención.

«Si surgen casos en España o en otro país es detectarlos e identificar sus contactos, contener la transmisión. La OMS ha elevado el nivel de riesgo para que los países pongan mayor atención a esa acción», ha dicho López.

A su juicio, lo que no tiene que haber es «pánico». «Hay que estar en alerta pero no hay que estar alarmados», ha afirmado.

Entre los expertos, también ha participado, por videoconferencia, la directora de Relaciones Públicas del Programa de Emergencias Sanitarias de la Oficina de la OMS en Europa, Cristiana Salvi, quien ha destacado que la dificultad en Italia fue no poder identificar al paciente O.