Tras varias semanas de dudas sobre incrementar las restricciones a nivel nacional para frenar los contagios de COVID-19, el Gobierno ha indicado que las empresas deberán, por su parte, enviar a casa a los trabajadores en la medida de posible para ejercer el teletrabajo de forma temporal.
Las medidas, que han sido implementadas con posterioridad a otros países europeos, se han vuelto necesarias para hacer frente a la pandemia en Suiza.
Asimismo, el Gobierno ha indicado que se ampliará el cierre de los restaurantes e instalaciones deportivas, así como culturales. Dichas restricciones estarán vigentes al menos hasta finales de febrero. «Esto es doloroso y a veces provoca enfado. Es la naturaleza humana», ha aseverado el presidente suizo, Guy Parmelin, que ha señalado, no obstante, que «debemos mantener el control».
A pesar de las restricciones, la mayoría de escuelas suizas y pistas de esquí seguirán abiertas en el país. El Ministerio de Sanidad ha indicado que en el último día se han registrado 3.001 contagios, por lo que la incidencia es de 447,5 casos por cada 100.000 habitantes --muy superior a la de países como Alemania--.
Suiza espera la llegada de una tercera ola de contagios para febrero a causa de la variante procedente de Reino Unido, la cual es más contagiosa.
1 comentario
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Madre mía la Armengol que mal gestiona Suizaaaaa!!! A lo mejor allí también hacen manifas ilegales por cerrar los bares. Ah no! Que allí no son analfabetos.