Matteo Renzi. | POOL

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El líder de Italia Viva, Matteo Renzi, ha abierto una crisis en el Gobierno de Giuseppe Conte tras anunciar la dimisión de las dos ministras de su partido. «La crisis no la ha abierto Italia Viva; la crisis está abierta desde hace meses», señaló el socialdemócrata Renzi, nada más comenzar una conferencia de prensa para anunciar la salida de su partido de la coalición gubernamental formada también por el Movimiento 5 Estrellas (M5E) y el Partido Democrático.

Las dos ministras que abandonan el Gobierno son la titular de Agricultura, Teresa Bellanova, y la de Familia e Igualdad, Elena Bonetti. «Se necesita mucha valentía y libertad personal para renunciar, y (también) sentido de la responsabilidad. Es mucho más difícil dejar un asiento, un sillón, que aferrarse a la tenaz búsqueda del statu quo», señaló Renzi. Y dijo que tiene la máxima confianza en el presidente de la República, Sergio Mattarella, como árbitro de la crisis.

Poco antes de su anuncio, el primer ministro, Giuseppe Conte, había confiado en que finalmente no se desatara la crisis de Gobierno, pues señaló que esto no lo entendería el país en estos momentos y prometió trabajar hasta el último momento para mantener la cohesión en el Ejecutivo.

Conte hizo estas declaraciones a los periodistas a salida del palacio del Quirinal, donde se reunió con el presidente de la República, Sergio Mattarella.

Renzi llevaba ya varias semanas amenazando a la coalición gubernamental con la dimisión de sus dos ministras, alegando sus diferencias sobre la gestión de los fondos europeos del Plan de Recuperación.

Sin embargo, para el resto de miembros del Gobierno se trata sólo de una excusa de Renzi para ganar más peso en el Ejecutivo y directamente forzar la crisis. «Estamos listos para discutir todo (...). Si hay un gobierno institucional, estamos listos para apoyarlo. Si hay un gobierno con la misma coalición ,estamos listos para apoyarlo. Si tenemos que ir a la oposición, estamos listos para hacerlo» --aseguró.

Pero los medios italianos han adelantado que tras la salida de Italia Viva de la mayoría, Conte no tendrá intención de negociar con Renzi un nuevo Ejecutivo y que estaría buscando apoyos externos entre los centristas. Si no lo logra, tendrá que dimitir y abocaría a Italia a nuevas elecciones.