1. Acelerada vuelta a la normalidad
La economía se ha reabierto rápidamente tras el confinamiento por coronavirus. A medida que se han ido retirando restricciones, han florecido con mucha fuerza las ganas de viajar o de ir a comer a restaurantes. Compramos más y gastamos el dinero que no pudimos gastar encerrados en casa. Por ello, cuando crece la economía, las empresas pueden subir precios sin perder clientes.
2. Desabastecimiento y crisis de microchips
Sin embargo, ante el repentino aumento de la demanda, al mismo tiempo que las cadenas de suministro aún estaban recuperándose del parón de la pandemia, ha provocado escasez de productos. El transporte de mercancías se ha vuelto caro y complejo. Además, al estar más en casa, se ha disparado el consumo de aparatos electrónicos o materiales para reformar viviendas, conllevando a una falta de componentes, en especial, microchips y semiconductores. Cuando las empresas no pueden seguir el ritmo al que la gente quiere comprar, los precios suben, explica el BCE.
3. El gas y la electricidad, más caros
El petróleo, el gas y la electricidad se han encarecido en todo el mundo. Ya venían subiendo en 2021 por una serie de factores externos, pero ha sido la guerra en Ucrania la que los ha disparado. Mientras que la Unión Europea aboga por sanciones económicas para castigara a Rusia, esta devuelve el golpe subiendo extremadamente los precios de las materias de que dispone, principalmente el gas, que se utiliza para generar energía. Así, hemos pasado en España de pagar este jueves, 8 de septiembre de 2022, 242,65 euros por megavatio hora (MWh), en comparación con los 135,65 euros por megavatio hora (MWh) que se pagaban tal día como este en 2021.
La inflación ha afectado en general a todos los países europeos, aunque de distinta forma. En los países que más sufren la disyuntiva encontramos a Moldavia (33,5 %), Estonia (24,8 %) o Ucrania (22,2%). Destaca el caso de Francia, donde los precios apenas han aumentado un 5,8 % desde el año pasado.
Inflación en Europa agosto 2022 |
País |
IPC |
Moldavia |
33,5 % |
Estonia |
24,8 % |
Ucrania |
22,2 % |
Letonia |
21,5 % |
Chequia |
17,5 % |
Bulgaria |
17,3 % |
Hungría |
15,6 % |
Rumanía |
15 % |
Eslovaquia |
13,6 % |
Polonia |
12,4 % |
Países Bajos |
12 % |
Grecia |
11,6 % |
Eslovenia |
11 % |
Bielorrusia |
10,4 % |
España |
10,4 % |
Reino Unido |
10,1 % |
Bélgica |
9,9 % |
Islandia |
9,7 % |
Austria |
9,3 % |
Irlanda |
9,1 % |
Portugal |
9,1 % |
Dinamarca |
8,7 % |
Suecia |
8,4 % |
Italia |
8,4 % |
Rusia |
8,4 % |
Finlandia |
7,8 % |
Alemania |
7,5 % |
Noruega |
6,8 % |
Francia |
5,8 % |
Suiza |
2,4 % |
Si miramos fuera del continente europeo, encontramos Estados Unidos con un 8,5 %; China con un 2,7 % o Australia, con un 6,7 %. En contraposición se sitúa Argentina (71 %), Turquía (70 %), Irán (52,2 %) o Venezuela (137,1 %).
3 comentarios
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Y no dirán el motivo principal que no es otro que la impresión desenfrenada de dinero que se ha hecho en el mundo…sobre todo EEUU y la UE en 2020 y 2021 para intentar levantar las economías durante la pandemia. El BCE y la Reserva Federal sabían que la inyección brutal de dinero iba a ser seguida por un período de inflación pero con lo que no contaban era con la guerra de Rusia y la subida de los precios de la energía motivada por la guerra. En EEUU se dice que entre 2020 y 2021 se ha impreso más dinero que los 40 años anteriores juntos…cómo no va a haber inflación!!! Ahora, la subida de tipos se supone que frena la demanda de dinero y por tanto resta liquidez al mercado con la esperanza de frenar la inflación. El problema es que suben los precios por la inflación y suben las hipotecas por la subida de tipos. Toda la historia ha habido épocas tranquilas y épocas convulsas…al final poco a poco se normalizará…los sueldos irán subiendo, la inflación controlandose y las aguas a su cauce.
Vaya vaya...y si los "Comunistas" no tienen la culpa?
El qué más sufre es el EUROPEO CON SUELDOS MÁS BAJOS.