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JOAN MASCARELL Más de un centenar de personas mayores con enfermedades crónicas son abandonadas cada año por sus familiares en el Hospital de Son Dureta, según ha podido saber . La mayoría de estos abandonos, algunos temporales y otros no, se concentran en Navidad pero también en Semana Santa y tienen sus orígenes en la imposibilidad de sus familiares de prestarles una adecuada atención por razones, principalmente, laborales y también por los desplazamientos temporales a la Península de sus allegados para ver al resto de la familia.

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Al respecto, el director territorial del Instituto Nacional de la Salud (Insalud) en Balears, Javier Rodrigo de Santos, explica que se trata de personas mayores con problemas crónicos que cada cierto tiempo necesitan de hospitalización por la agudización de su patología. «Entran en el hospital, se estabiliza su problema y cuando se les va a dar el alta nos encontramos con que o sus familiares no están o se niegan a ello», explica Rodrigo de Santos.

Esta situación, según reconoce el director territorial del Insalud, «se da sobre todo en Navidad. Nos encontramos en nuestros hospitales que muchas personas nos dejan 'aparcados' sus mayores para que los atendamos durante las vacaciones porque se van a la Península».

Así, se trata de problemas sociales y no sanitarios que originan importantes trastornos a los hospitales del Insalud en las Islas que ya de por sí tienen pocas camas hospitalarias. En Son Dureta, señala Rodrigo de Santos, el número de abandonos puede oscilar entre 100 y 150 mientras que en los otros hospitales gira en torno a una treintena.