El BBV Privanza, que la semana inauguró su primera oficina en
Palma, ofrece a sus clientes de Balears la gestión discrecional de
carteras, creando si hace falta, las estructuras necesarias para
reducir el impacto fiscal de los beneficios de las inversiones,
afirmó su director Pedro Oliver.
«BBV Privanza cuenta con una gran experiencia en la constitución
y gestión de las sociedades de inversión inmobiliaria de capital
variable, habiendo creado en 1998, prácticamente, el 50% del total
de las que se han creado en España», explicó. Dijo, en ese
contexto, que las sociedades de inversión inmobiliaria de capital
variable «son el instrumento más adecuado para gestionar
patrimonios personales, familiares y empresariales superiores a los
400 millones de pesetas, por su tipo impositivo hiperreducido al
1%». Según el director del BBV Privanza, el 3% de las personas o
familias con patrimonios superiores a los 50 millones de pesetas de
todo el territorio nacional se encuentran en Balears, y el 1'6% del
total de personas con patrimonios superiores a los 500
millones.
Oliver explicó que «creemos que los segmentos de mercado antes
descritos podrían salir ganando con una oferta de servicio
altamente especializado y de calidad como es el nuestro. El hecho
de que el 84% de los fondos que controla el Banco lo sean bajo
gestión discrecional demuestra ante todos dos cosas: la gran
confianza de nuestros clientes que viene dada por una capacidad y
de genera beneficios a nuestros clientes, largamente demostrada en
el tiempo».
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