20/08/99 0:00
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Los Prat están tan unidos que incluso se bañan juntos Aunque, a pesar de ese cuerpo que tiene, se considere una niña, Alejandra Prat es una joven con todo el sentido común de este mundo, a quien la vida, a costa de tropezones, le está enseñando. Al menos es la conclusión que uno saca tras haber mantenido una conversación más o menos larga con ella. Vamos, que es mucho más de lo que uno se imagina viéndola, y de lo que ella aparenta a través de esa imagen glamurosa y, en ocasiones, frívola que puede dar. O si lo prefieren: Es algo más que un cuerpo y una cara bonita y encima es consciente del papel que le ha tocado jugar en esta vida, a veces en un lado de la cámara, a veces en el otro. Tal vez por ello es por lo que sabe comportarse entre periodistas.

Por otro lado, Alejandra es miembro de una familia muy unida, tanto que incluso a veces se bañan juntos, como la otra tarde. «Unida "matiza Alejandra" y con buen rollo entre todos, que es como debe ser».

A Alejandra le pregunté cómo se lo habían tomado sus hermanos y ella al ver salir, de pronto, a su madre con Rafa Velón, cuando no hacía mucho todavía que su padre había fallecido, lo cual dio lugar a numerosos rumores. Y una vez más nos sorprendió con la respuesta:
"A nuestra madre la adoramos. Y entre los hermanos nos llevamos fenomenal, a pesar de que cada cual tenemos nuestras cosas y... bueno, pues que todos tenemos muy claro que el hombre de la vida de mi madre ha sido nuestro padre, Joaquín. Lo sabe ella, lo sabe todo el mundo y lo sabe también mi padre, esté donde esté. Entonces, ¿qué pasa? Una mujer joven como ella con una vida por delante, con hijos pequeños que necesitan de su apoyo y... pues si ella es feliz con Rafa, que es un encanto de hombre y a quien conocía de muchos años atrás, si ella es feliz, repito, y nosotros la vemos feliz, mejor que sea así que verla todo el día triste y vestida de negro, sufriendo.

En cuanto a su futuro, nos dijo que iba a seguir en el programa de María Teresa Campos:
"Con ella comencé hace dos años, con ella he aprendido mucho y con ella seguiré. Además, quiero ir poco a poco. Mi padre me aconsejaba que no es bueno ascender muy rápido, pues se puede caer también muy rápido. Así que no tengo prisa.