El Consell Insular de Mallorca aprobó ayer por unanimidad y sin el
más nínimo debate los nuevos sueldos de los políticos de la
institución, que en algunos casos registran incrementos superiores
al 50 por ciento respecto a 1999. El PP no discutió este acuerdo,
pero sí criticó que se utilicen 24 millones de un fondo del
catálogo de puestos de trabajo para poder pagar a los nuevos
asesores del gobierno del Consell.
El pacto de los sueldos surtió efecto y los políticos quisieron
pasar de puntillas sobre el asunto. A partir de ahora la presidenta
del Consell cobrará 9.242.434 pesetas brutas al año, y los
vicepresidentes tendrán un sueldo de 8.450.522 pesetas anuales. Los
consellers responsables de área cobrarán 8.035.088 pesetas al año,
y los portavoces, 5.900.000 pesetas anuales.
Uno de cada cuatro consellers sin responsabilidades de gestión
ingresará 3'5 millones anuales, y los miembros de la corporación
que no tengan un sueldo fijo ingresarán 40.000 pesetas por cada
plenario y 20.000 pesetas por comisión.
María Salom, del PP, lamentó que «se quite el dinero de los
funcionarios para pagar a los nuevos asesores». «Los funcionarios
no han podido cobrar más por culpa de la delegada del Gobierno»,
reaccionó la presidenta Munar, mientras Alorda, del equipo de
gobierno, se comprometió a tener listo el catalálogo de puestos de
trabajo «el uno de enero del próximo año».
Salom recordó que el Consell quería aumentar el sueldo de los
funcionarios cuando era ilegal, y acusó al gobierno de la
institución de «no aprobar el catálogo por incapacidad». Alorda
asumió su responsabilidad sobre esta cuestión, aunque también culpó
al anterior gobierno del PP de no haber actualizado el catálogo de
puestos de trabajo.
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