Los representantes de los vecinos y de los agricultores y ganaderos
del Pla de Son Ferriol amenazaron ayer con cortar la carretera y
movilizarse si, finalmente, el Ajuntament de Palma permite que el
antiguo campo de fútbol de la localidad sea utilizado por los
transportistas para verter los escombros.
El pasado viernes, los transportistas de contenedores de
escombros llegaron a un acuerdo con las instituciones de la Isla
para poner fin a la huelga que habían convocado para protestar por
falta de instalaciones adecuadas. El sector propuso utilizar para
este fin el antiguo campo de fútbol y el Govern, por su parte, que
en la parcela se construyera una planta de selección de residuos y
que los escombros de obras se destinaran para rehabilitar
canteras.
Ante el acuerdo de las partes el problema parecía solucionado.
Cort se comprometió a pedir la recalificación del terreno como de
interés general, el CIM se comprometió a darla y, de nuevo Cort,
concedería la licencia de obras.
El único punto que no estaba cerrado era si esta ubicación sería
la definitiva o sólo temporal pero ya se estaba negociando en este
sentido ya que los transportistas pedían urgentemente una solución.
Sin embargo, los vecinos y pageses de la zona, que aseguraron
haberse enterado de la noticia por la prensa, solicitaron ayer por
la mañana una reunión con el alcalde para exponerle su malestar por
el solar escogido.
El presidente de la Asociación de Vecinos del Pla de Son
Ferriol, Gabriel Ramis, aseguraba poco antes de entrar en la
reunión que no permitirían, «bajo ningún concepto», que en el campo
de fútbol se instalara la planta de selección de residuos. Los
vecinos argumentan que crear esa instalación en la zona
perjudicaría las infraestructura y que están dispuestos a
movilizarse y a cortar la carretera de acceso para evitar el paso
de «más de 500 camiones al día».
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