Vecinos del barrio palmesano de Santa Catalina y miembros de ARCA
han expresado su disconformidad con el proyecto de construir un
edificio de cinco plantas junto al hostal Cuba debido a que
«variará de forma sustancial la fisonomía de la zona», precisaron.
La empresa constructora, por su parte, afirma que cuenta con todos
los permisos necesarios para afrontar la obra, cuyo inicio ha
sufrido un retraso y no se desarrollará hasta principios del
próximo año, según confirmó a este diario Francisco Ruiz, portavoz
de la empresa constructora y propietaria de los terrenos, Jaime
Bibiloni SA.
El edificio, que dará una nueva configuración a la manzana que
comprende la avenida Argentina, San Magín, Joan Santaner y Servet,
tendrá una altura de cinco plantas y en el sótano se habilitará un
aparcamiento para unos 35 coches, aproximadamente. Los 3.000 metros
cuadrados que abarcará el inmueble están vallados desde hace meses,
a la espera de que los operarios inicien las obras.
La zona, de gran valor urbanístico y arquitectónico, ha merecido
la atención de ARCA, cuyos portavoces han manifestado su inquietud
por el alcance de la nueva edificación. «Somos conscientes de esos
temores de los vecinos y asociaciones que protegen el entorno de
Palma, y por ello, podemos garantizar que vamos a construir un
edificio singular, de alta calidad, que no sólo respetará las
características propias de la zona, sino que incluso mejorará su
«status», dijo Ruiz. Cada una de las cinco plantas constará de tres
viviendas (15 en total).
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