Los taxistas de los once municipios de la Part Forana que se han
unido para defender su derecho a cargar en el aeropuerto de Palma
aceptaron la propuesta realizada por el director del aeropuerto de
situar su parada junto a los vehículos de clase C (coches de lujo
con conductor), frente a la terminal de llegadas.
Este colectivo se reunió ayer con Mariano Menor, quien les
ofreció lo que considera la mejor solución de cara a facilitar el
control.
En la asamblea celebrada ayer, estos taxistas mostraron su
conformidad a la realización de inspecciones por parte de la
Conselleria «pero siempre y cuando sean para todos por igual»,
apuntó su representante legal, Andrés Buades. Tampoco descartaron
plantear la idea de la mancomunidad. «Habría que aclarar muchos
aspectos pero no se desecha», dijo Buades. Por último, la asamblea
se comprometió a cumplir los términos del decreto nacional y
declaró su desacuerdo con la «amenaza» del regidor de Governació de
Cort, José Manuel Sierra, de obligar a los taxis foráneos a cumplir
a las disposiciones sobre el control de calidad de los vehículos de
Palma, para lo que opinan «no tiene competencia».
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