El Govern balear ha exigido al Ajuntament de Palma la disolución
del Consorci del Parc de ses Estacions, si bien se compromete a
mantener sus compromisos económicos relacionados con el proyecto de
construcción del parque. El conseller d'Obres Públiques, Josep
Antoni Ferrer, expresó ayer al concejal de Urbanismo en Cort, Rafel
Vidal, su firme intención de desmarcarse de lo que se considera un
proyecto municipal.
Más aún, desde el Ejecutivo se rechaza el concepto mismo del
parque construido y de la segunda fase del proyecto que está aún
por ejecutar, consistente en el soterramiento de las Avenidas para
la integración de la Plaza de España en el conjunto de la zona
pública. El conseller sostiene que «se ha truncado lo que podría
haber sido un proyecto mucho más interesante para la ciudad, que
habría sido el convertir la Plaza de España en un centro intermodal
de comunicaciones, en favor de una obra que no se sabe muy bien qué
sentido tiene». No obstante, Ferrer dejó claro que «se respeta la
autonomía municipal» para seguir adelante en solitario con las
obras y que el Govern respetará el compromiso económico adquirido
por el anterior Ejecutivo del PP.
Según este acuerdo, la Comunitat debe pagar el 50 por ciento de
la obra, es decir, 750 millones más intereses, que al final suman
1.103 millones. Hasta el 2001 tan sólo se pagan intereses, y del
2002 al 2013 el pago se realizará a razón de 62 millones al año. El
Govern tampoco quiere tener nada que ver en «cualquier otro tipo de
acuerdo o compromiso» alcanzado entre el Consistorio y terceros o
en el caso de que el presupuesto previsto resulte, al final,
insuficiente, «como tememos». Vidal reconoció que «por nuestra
parte no nos queda más salida que aceptar la disolución del
Consorci y seguir por nuestra cuenta».
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