El segundo «bautizo de capoeira» del grupo Naçao se realizó ayer en el Pueblo Español de Palma ante un público ávido de este espectáculo que se ha puesto de moda. A la ceremonia asistieron, como invitados de excepción, algunos de los mejores maestros de capoeira, Marcos Alabama, César Carneiro o Zé Doro, entre otros.
El acto consistió en examinar y graduar a los 60 alumnos que participaron según los niveles que han adquirido durante el curso. A todos se les impusieron los cinturones correspondientes. La acrobacia acompañada de la música de tendencia samba-reggae convierte a la capoeira en todo un arte, que nació en Brasil. El ritmo provoca una lucha con un desbordante contenido espiritual. Incluso algunos de los que lo practican afirman que es un modo de vida. La capoeira requiere una buena forma física, ya que se realizan numerosos saltos rápidos y acrobacias en todo tipo de posturas.
El maestro Neri Lima es quien ha conseguido el auge de la capoeira en Palma. Su trabajo diario motiva que chicos y chicas de todas las edades sientan un gran interés por aprender este arte marcial desbordante de historia.
César Carneiro, uno de los invitados a la ceremonia de ayer, comenzó a practicar la capoeira cuando tenía siete años. Asegura que se trata de un arte marcial, y no de un baile, que necesita de una amplia gama de reflejos.
«Para practicar la capoeira es más importante la fuerza mental que la física, es como el ajedrez, si haces un movimiento en falso no es fácil reaccionar». La capoeira a este maestro le ha servido para participar en películas con Jean Claude Van Damme o Bolo Yong. Actualmente da clases en Nueva York y acudió al Pueblo Español para dar prestigio al evento.
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