El aumento de la demanda de sangre obliga a pedir solidaridad

Hasta el pasado mes de septiembre, ya se habían utilizado en la isla más 24.000 bolsas de 450 centilitros de sangre cada una, lo que supone que cada mes se han empleado una media de casi 2.700 bolsas, cifra muy superior a las 2.300 previstas al mes para este año.

El vicepresidente de la Hermandad, Antonio Aguilar, afirma que «en números no estamos tan mal. Respecto a 1999, estamos entre el 11 y el 12 por ciento por encima de la donación de sangre y con un 18 por ciento de donantes nuevos; sin embargo, lo que necesitamos es la fidelidad de los donantes. El problema es que no somos conscientes de la necesidad que supone, por eso la donación debe convertirse en una costumbre habitual en la población. Si cada donante donara una bolsa de sangre al año sería suficiente», sentenció Aguilar.

El vicepresidente de la Hermandad expuso que la tasa de donación en Mallorca es alta, de 50 donaciones por cada mil habitantes al año, pero insistió en el aumento del consumo. El representante de la Hermandad recordó que cada vez hay más población en la isla, residentes extranjeros a los que también deberemos dirigir nuestras campañas.

Aguilar explicó que las reservas de sangre del grupo O positivo son muy bajas, por lo que ante cualquier situación de emergencia médica puede llegarse a un punto extremo. «De hecho, un día de la semana pasada se tuvieron que suspender las intervenciones ante la falta de sangre del grupo O positivo», declaró. No obstante, fuentes del Hospital de Son Dureta y de los centros de Gesma han negado este extremo.