El ritmo de Azahara

Desde muy pequeñas, todas ellas ya bailaban y se movían a ritmo de sevillanas, flamenco y todo tipo de bailes. Marta tiene 15 años de edad, es la más pequeña del grupo y quiere ser periodista, aunque por sus venas corre sangre de artista. Rebeca es una gran admiradora de Antonio Cortés. Tamara quiere ser enfermera en un futuro. Jenny todavía no lo tiene claro, ella sigue bailando, que es lo que más le gusta. María Àngeles quiere estudiar ciencias empresariales o economía. Vanessa es la mayor del grupo, tiene 18 años, y quiere dedicarse profesionalmente al turismo.

El show que el grupo presenta tiene una duración aproximada de una hora. Durante la actuación, las chicas ofrecen un amplio repertorio de bailes, desde el tango, cha cha cha, boleros, valls, merengue hasta flamenco, incluso coreografías modernas con actuales éxitos musicales.

Es cierto que han recibido algunos obsequios como flores o bombones, pero también tienen algunas anécdotas como caídas o la «afición» de Tamara, que alguna vez se le ha salido el zapato mientras baila y ha ido a parar a la cabeza de alguien del público.

Dedican varias horas a la semana a ensayar o aprender algunas coreografias, incluso, en alguna ocasión, ellas mismas han creado bailes y movimientos para poner ritmo a la música. Aseguran no ir al gimnasio o practicar otro tipo de deporte, con el baile ya les es suficiente el ejercicio que hacen, pero tienen unos cuerpos tan moldeados como los de las modelos.