Munar logra que el Pacte apoye la gestión de Lacy

La inesperada convocatoria del pleno irritó a los consellers del PP, que optaron por abandonar la sala sin siquiera debatir el tema. El portavoz de los populares, Jaume Font, aseguró que el pleno había sido «una comedia, una gracia de Munar».

Para participar en el debate, los populares exigieron que el secretario de la Corporación realizara un informe acerca de la posible incompatibilidad de Lacy al votar el PGOU de Calvià. En opinión del PP, el president de la Comissió d'Urbanisme no podía votar el PGOU de Calvià ya que en su día fue asesor de la promotora que pretendía construir en los terrenos de la Marina. Para la presidenta de la Corporación, la petición de los populares no tenía razón de ser dado que existe un informe jurídico del departamento de Urbanisme que niega la incompatibilidad de Lacy. «Los informes aseguran que hizo un uso institucional del voto y, si ustedes no están de acuerdo, lo mejor es que presenten un contencioso», señaló la presidenta.

Sin embargo, el portavoz de los populares insistió en que el informe de los servicios técnicos de Urbanisme no es suficiente, ya que, al tratarse de un asunto de posibles incompatibilidades, debe ser el secretario de la Corporación quien redacte un informe administrativo. Para Munar, la única intención de los populares es «alargar» este asunto y «huir de otros temas particulares que les afectan más directamente». Munar se refería a los intereses urbanísticos de los miembros del PP Pere Rotger, Mabel Cabrer y Carlos Delgado.