La piel será sin duda la protagonista del Dijous Bo 2000. Ayer se celebró en la ciudad el desfile inaugural de la pasarela «Inca ciutat de la Pell». No obstante, todos aquellos que se quedaron sin verlo podrán hacerlo hoy a las doce del mediodía, cuando está previsto que se celebre el segundo pase del desfile.
La calidad, la sobriedad y el diseño fueron los principales atractivos de los innovadores diseños que presentaron las fábricas de Inca.
Las tendencias del calzado, en el caso de las mujeres, presentaron un tacón mediano y, mayoritariamente, cuadrado. El botín sigue siendo una clara apuesta de los zapateros para el próximo invierno. Y, mientras, el zapato plano presenta líneas muy redondas que tienden hacia el deportivo, los modelos de vestir apostaron por el sin talón, que realza la línea de la pierna femenina.
En cuanto a los hombres, el calzado es mucho más sobrio, de pieles apagadas y colores oscuros. En el armario de 2001, la piel estará presente a través de diseños muy rectos y cortes simples. Los abrigos serán cortos o largos hasta los pies, huyendo de las medias tintas.
Respecto a los colores, predominan el granate y el verde botella, rompiendo la monotonía de marrones y negros. En el desfile estuvieron presentes el vicepresident, Pere Sampol, y la presidenta del CIM, Maria Antònia Munar.
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