El sistema educativo debe preparar a los alumnos para que sepan
enfrentarse a la vida social y laboral en opinión de la sociedad en
general y según se desprende del informe «Identificación de las
competencias básicas en la enseñanza obligatoria», elaborado de
forma conjunta entre las comunidades autónomas de Balears, Canarias
y Cataluña en el marco de la Fundació de las Regions Europees per a
la Recerca en Educació i Formació (FRERER).
Las conclusiones de este estudio la dio a conocer ayer a los
centro concertados de Balears el conseller d'Educació i Cultura,
Damià Pons, acompañado por el representante de este informe en
Balears, el inspector de Educación Miquel Vives, y por catedrático
de Pedagogía Jaume Sarramona, responsable científico del estudio.
Jaume Sarramona explicó a este periódico que se trata de «un
trabajo en el que hemos consultado a la sociedad qué conocimientos
deberían saber y qué deberían saber hacer los alumnos al acabar la
enseñanza obligatoria. Es la primera vez "añadió el responsable
científico del estudio", que se pregunta al personal docente,
padres, alumnos y colectivos de la sociedad en general sobre lo que
debe hacer la escuela».
Sarramona indicó que las competencias se han organizado en cinco
áreas: matemático, social, tecnocientífico, lingüístico y laboral
y, según la respuesta de los colectivos consultados, el ámbito más
importante es el laboral. «La sociedad dice que la enseñanza deber
preparar a los alumnos para afrontar la vida laboral», declaró el
catedrático. En el otro extremo del interés, se encuentran los
ámbitos tecnocientífico y matemático, a los que se asigna menor
importancia. «Lo que más valoran de este área es que sirve para
comprender y relacionarse en la vida cotidiana, es decir, son
aquellos conocimientos, habilidades y actitudes más elementales,
como saber sumar, restar, multiplicar y dividir», explicó el
director del estudio.
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