La empresa de telecomunicaciones Tradia, la antigua Difusió Digital
que la Generalitat de Catalunya privatizó el pasado mes de mayo, ha
planteado al Govern su disposición de invertir, al menos, 2.500
millones de pesetas en la instalación de una red de 30 centros de
distribución de la señal de televisión, que garantizaría la
recepción de cuatro canales en el 98'5% del territorio balear.
Esa propuesta fue anunciada ayer por el presidente de la
compañía, Joaquim Pujol Figa, en el transcurso de una rueda de
prensa a la que también asistieron, Xavier Peiró, consejero
delegado de Tradia, Ferrán Gomila, presidente de la Asociación
Voltor y Antoni Mir, presidente de la Obra Cultural Balear. Los
directivos de Tradia se desplazaron a Palma con el objetivo de
firmar un convenio con la asociación Voltor para hacerse cargo
durante 15 años del uso y mantenimiento de las instalaciones que
posee esta entidad en Alfàbia.
Ese acuerdo permitirá la definitiva recepción de TV3, C-33, C-9,
Telenova/Canal 37, Canal 4, y las emisoras autonómicas de radio de
Catalunya y Valencia.
El consejero delegado resaltó que el Govern ya utiliza la señal
de los canales de televisión públicos catalanes y valencianos para
difundirlos por medio de sus repetidores en Menorca y Eivissa, lo
que podría facilitar el acuerdo sobre su oferta, que sería
ampliable para usos ajenos a la televisión.
El convenio firmado entre Tradia y Voltor establece que la
compañía catalana, participada en un 13% por la Generalitat, asume
la gestión y el mantenimiento de los equipos de Alfàbia y alquila
el 70 por ciento de los terrenos de la cima durante 15 años
(ampliables por 8 años), todo ello con un coste anual de unos 4'5
millones de pesetas para la asociación, que recibe una subvención
de 15 millones del Consell de Mallorca.
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