Los mercadillos tradicionales de Navidad se abren hoy al público y,
un año más, permanecerán hasta el próximo 6 de enero, día de Reyes.
El horario comercial de los dos mercadillos que se instalan en la
Plaça d'Espanya y la Plaça Major es de las 09.00 y las 21.00 horas
de forma ininterrumpida, según informaron ayer fuentes del
Ajuntament de Palma. El mercado de la Plaça d'Espanya es el más
grande de los dos, con un total de 83 puestos. El número de plazas
disponibles no ha sido suficiente para corresponder a las 121
solicitudes presentadas. En estos casos tiene preferencia la
antigüedad.
En cambio, en el mercadillo de la Plaça Major se han colocado
este año 29 puestos, con lo que no se ha cubierto el número de
peticiones presentadas, 32. En este caso pesa la especificidad de
los productos que pueden venderse. La diferencia entre uno y otro
en visible, pero la más importante es que es en la Plaça Major
donde se venden los productos típicos de las fiestas navideñas,
pero está prohibida la venta de bisutería y regalos para evitar la
competencia con las tiendas de los sótanos de la plaza.
Así, en él está permitida la venta de belenes, pastorcillos,
árboles de Navidad, juguetes y productos de cerámica, madera y
flores artificiales. También hay puestos de productos alimentarios,
donde se autoriza la venta de turrón, mazapán, almendras,
palomitas, mantecados, algodón dulce, frutos secos, cocos,
golosinas, castañas asadas, churros, etc.
En el mercadillo de la Plaça d'Espanya la venta de productos
alimentarios se limita a la churrería, golosinas, castañas y
boniatos asados, gofres y crepes. Y en este caso, en lugar de
productos navideños, se vende artesanía, marroquineria, bisutería,
artículos de regalo de pequeño tamaño, complementos de vestir, como
pañuelos, corbatas o cinturones, pero en ningún caso ropa o
confección.
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