El Día Internacional del Sida transcurrió ayer en Palma con la celebración de varios actos culturales, la puesta en marcha de varios estands informativos y una contundente actitud de denuncia.
Los colectivos Ben Amics (Gais i lesbianes de Mallorca), Alas, Consell de Joventut, Siloé, Escola de Sida de Balears, Cruz Roja Juventut y Médicos del Mundo dieron a conocer un manifiesto reivindicativo con la intención de mejorar la situación de aquellos que viven marginados a causa de la letal enfermedad.
«Denunciamos que el reciente decreto ley que modifica los criterios de concesión de pensiones a personas con esta enfermedad no contempla la situación social ni el estado psicológico de los enfermos; que en las instituciones penitenciarias se mantienen relaciones sexuales y se consumen drogas por vía intravenosa sin control sanitario; que los recursos que recibimos las ONG son precarios, limitando la calidad de nuestro trabajo», señala la contundente misiva.
Ésta continúa denunciando «que la mayor parte de los recursos anti"sida están centrados en Palma, olvidándose la Part Forana; que los emigrantes con infeccción VIH (seropositivos) no están en igualdad de derechos sociales y que las medidas de carácter policial destinadas a las personas que ejercen la prostitución son fruto de una actitud excluyente». Por otra parte, se inauguró en el Centre Flassaders la exposición «Memòria VIHistòrica», un recorrido visual por la última decada de la enfermedad del sida.
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