El ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, ha comunicado por
escrito al Congreso de los Diputados que su departamento no va a
financiar las desaladoras móviles adquiridas por el Govern. En una
pregunta realizada por la diputada socialista por Balears Teresa
Riera, Matas informa que las desaladoras móviles «no cumplen los
requisitos» para poder ser financiadas. En su respuesta, el
político mallorquín recuerda que las unidades móviles de desalación
«han sido ya ejecutadas, no habiéndose producido previamente la
declaración de interés general ni estando amparadas por un convenio
de colaboración, trámites previos y preceptivos a la realización de
la inversión».
De esta manera, Matas vuelve a dejar claro que el Ministerio de
Medio Ambiente no cederá ante la petición del Govern, que pretende
que la Administración central financie las desaladoras móviles.
Estas instalaciones fueron adquiridas por el Govern el pasado
verano y tuvieron un coste de 3.000 millones.
Precisamente, el Govern volverá a incluir esta propuesta en la
reunión de la comisión mixta que debe estudiar el protocolo
hidrológico entre el Ministerio de Medio Ambiente y la Comunitat
Autònoma.
En la información parlamentaria, el Ministerio de Medio Ambiente
recuerda que «el problema del agua en Balears está fundamentalmente
centrado en el abastecimiento a poblaciones, cuya competencia,
tanto en lo referente a la realización de infraestructuras como a
su posterior explotación, corresponde a los ayuntamientos.
Asimismo, el departamento que dirige Jaume Matas también precisa
en la contestación a la socialista Teresa Riera que «la
intervención del Ministerio de Medio Ambiente en actuaciones de
abastecimiento de agua se limita a aquellas obras que sean
declaradas previamente de interés general, y cuya gestión y
ejecución se instrumente a través del correspondiente convenio de
colaboración».
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