TW
0

El regidor d'Educació i Joventut, Jordi Llabrés, exigió ayer a la Conselleria d'Educació i Cultura una planificación conjunta de las necesidades educativas de Palma, tal como establece el Real Decreto 2274/1993, de 22 de diciembre, de cooperación de las Corporaciones Locales con el Ministerio de Educación y Ciencia. «Queremos que se nos informe y se nos consulte sobre cuántos centros se necesitan, qué solares se requiere y cómo se van a financiar las obras, y no sólo que se exija sin dar explicaciones», dijo el edil en respuesta a las críticas vertidas desde el Govern en el sentido de que Cort negó la cesión de un solar en el centro para un centro de secundaria.

Llabrés recordó que, según dicho decreto, Cort tiene la obligación de colaborar en la educación obligatoria, es decir de 3 a 16 años, pero en cuanto a la educación no obligatoria, «sólo se establece que los municipios colaborarán con el Ministerio -en este caso la Conselleria- en el estudio de las necesidades educativas». En este sentido, recordó que el pasado 5 de abril la Conselleria «nos remitió escritos solicitando se pusieran a su disposición solares en diferentes zona de Palma para la construcción de centros escolares». En concreto, se reclamó suelo para construir en Can Pastilla-Coll d'en Rabassa, Son Oliva y Cas Capiscol y la ampliación de los colegios públicos Marian Aguiló y Es Pont.

El 19 de junio, la regiduría contestó a esta petición «exponiendo la disponibilidad de suelo en las zonas solicitadas» y también se remitió la lista de solares calificados como docentes en el vigente PGOU. Al respecto, la Conselleria manifestó que de éstos no había ninguno de su interés. Pero, según explicó, «los solares interesados o bien no están calificados como equipamientos docentes o no son de propiedad municipal, lo que hace imposible obtenerlos en un plazo corto, e incluso se interesan terrenos en zonas no urbanizables, como el de Son Ferriol».