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La asociación El Refugi organiza un año más el «Rastrillo de Nadal Solidari», que llega este año a su séptima edición. El Círculo de Bellas Artes, en la calle Unió, acoge el rastrillo desde mañana, día 14, hasta el sábado de la presente semana. Alrededor de 50 personas trabajarán de forma desinteresada en las diferentes secciones de que consta el rastrillo "antigüedades, bazar, libros, muebles de ocasión, ropa, y un largo etcétera" con la finalidad de obtener el máximo de recaudación para el mantenimiento de la asociación El Refugi.

A la presentación del rastrillo, celebrada ayer por la mañana, acudieron Antoni Garau, presidente de El Refugi; Jaume Santandreu y Gaspar Aguiló, representantes de la asociación; y Antoni Nadal, concejal de Acció Social del Ajuntament. «El Refugi está ahora en una etapa de consolidación y para ello contamos con la ayuda de las instituciones», señaló Garau, para añadir: «La finalidad de nuestra asociación es que nadie esté en la calle. Nosotros atendemos a aquellos marginados del 'último escalón', a aquellos a quien nadie quiere». Garau animó a los posibles clientes a pasarse por el rastrillo, «este año hay más género que otros años y a muy buen precio», concluyó.

Por su parte, Santandreu afirmó: «Somos malditos que atendemos a los malditos. Pedimos para las personas en situación ilegal, para los enfermos de sida, para los expulsados de los hospitales». Santandreu añadió que le gustaría que los mercadillos pudiesen entrar a formar parte, en breve, de lo que se viene llamando «comercio alternativo». «La ayuda de todas las instituciones es básica para que El Refugi pueda seguir adelante. Las buenas obras se han de continuar», concluyó Nadal.