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Había temor en la Conselleria de Turisme ante el anuncio realizado por parte de la Federación Hotelera de no acudir al acto organizado en el hotel Ritz de Madrid, pero las previsiones se desbordaron al final, dado que hubo cerca de dos centenares de personas, lo que provocó más de un sofoco en el lugar elegido. Y hablamos de «lugar elegido», dado que a diferencia de lo sucedido en otras ocasiones, se realizó el acto en la sala pequeña de reuniones en vez del salón de actos, mucho más amplio y en donde se hubieran notado más los «huecos». Hecha esta salvedad, lo que sí es cierto es que la presentación de la página Web de Ibatur en internet aglutinó a empresarios, políticos del PP, hoteleros menorquines, ibicencos, banqueros, representantes de la Secretaría de Estado de Turismo, ex ministros, etc. Alomar se mostraba satisfecho al final por cómo habían evolucionado los acontecimientos y tildó de inútil la actitud de los hoteleros. Está claro que hay una división entre Alomar y los grandes empresarios hoteleros mallorquines.

Los hoteleros se quejan de que Fitur se ha convertido en un centro de reunión de políticos, cuando lo propio es que fuera un centro de reunión de profesionales del turismo al tratarse de una feria internacional de turismo, pero los intereses mandan en esta historia.

La representación de alumnos de la Escola d'Hoteleria, que ha realizado demostraciones de cocktelería y preparado degustaciones de productos gastronómicos de Balears, se ha saldado con un diez. La formación es vital para el futuro del sector de la hostelería y la función de la Escola d'Hoteleria cumple, en este sentido, un papel esencial. Hoteleros y profesionales del sector han alabado durante estos días la labor de estos jóvenes profesionales del mundo de la restauración.