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«Además de las medidas de gestión y planificación, es fundamental que hagamos esfuerzos para implantar una auténtica cultura del agua, que ya existía en la sociedad preturística y que existe hoy en las sociedades prósperas del norte de Europa, donde curiosamente, no sufren los efectos de la falta de agua», dijo ayer el president del Govern, Francesc Antich, al clausurar en Sa Nostra el I Congreso Baleares 2015 «El Agua. Perspectivas de futuro».

Antich estuvo acompañado en el acto por la consellera d'Medi Ambient, Margalida Rosselló; el conseller d'Hisenda, Joan Mesquida; la presidenta del Consell Insular de Eivissa, Pilar Costa; la responsable de Medi Ambient del Consell de Menorca, Maria Lluisa Dubón; y el presidente de Sa Nostra, Miquel Capellá, que resaltó que el congreso es el primero de una serie de eventos englobados en el proyecto «Baleares 2015».

Antich dijo que este foro de reflexión y debate «responde a los interrogantes que se hace la sociedad, que no son nuevos pero que los poderes políticos y económicos no les habían prestado mucha atención. Y estos interrogantes no son otros que los que hacen referencia a la capacidad de nuestros recursos naturales para aguantar la presión a la que los hemos sometido».

Para Antich, «el crecimiento desbocado nos ha conducido a una situación límite que pone en peligro el futuro», por lo que «tenemos que ir hacia un modelos sostenible». Antich señaló que su Govern tendrá en cuenta las opiniones que han aportado los expertos internacionales presentes en el congreso y subrayó las coincidencias entre sus planteamientos y los de los partidos del pacto de gobierno. Dijo que «la falta de planificación adecuada» ha llevado al archipiélago a una situación delicada. «Es preciso proyectar en Balears infraestructuras adecuadas a las dimensiones y valores naturales de las islas e incidir en la gestión de la demanda», precisó.