TW
0

El portavoz del grupo parlamentario del PP, José María González Ortea, criticó ayer duramente la auditoría realizada por la empresa catalana Faura-Casas en el Instituto Balear de Turismo (Ibatur), «ya que demuestra un absoluto desconocimiento sobre cómo funciona una empresa pública de estas características, circunstancia que recoge un contrainforme firmado por la actual directora de Ibatur, Tifanny Blackman».

González Ortea afirma que la auditoría «no es de recibo y la prueba más concluyente es el contrainforme de Blackman, pero todo esto es la respuesta que se me da y esperaba por las amenazas del presidente del Govern, Francesc Antich, ya que dijo que iba a tratar de hacerme todo el daño del mundo por lo sucedido con el contrato de Felio Morey en el ParcBit».

Las preguntas que se hace González Ortea y que exige que responda la Conselleria de Turisme y el propio presidente del Govern «van referidas a las contrataciones realizadas por Ibatur falsificando los concursos y sobre los 500 millones de más pagados por las fincas de Aubarca y Es Verger».

González Ortea pone en tela de juicio la auditoría de Faura-Casas, en el sentido de que también se tendría que haber auditado el período comprendido entre el 30 de junio de 1999 y el primer cuatrimestre de 2000, «la comisión de investigación parlamentaria se creó para investigar las tres contrataciones realizadas por Ibatur, pero parece que sólo se han centrado en auditar la gestión de Ibatur bajo gestión del Govern del PP, lo cual no es lógico cuando se trataba de esclarecer unos hechos concretos».