«No más Tívolis. Basta ya». Así rezaba ayer la pancarta bajo la que
una treintena de personas se concentraron en la plaza Major de
s'Arenal, como muestra de apoyo a los trabajadores de la
construcción muertos y heridos en el derrumbe del hotel Tívoli. A
la concentración convocada por los vecinos de s'Arenal se sumaron
algunos familiares de los fallecidos en el accidente, el director
general de Treball del Govern, Fernando Galán, además de algunos
militantes de Esquerra Unida.
El portavoz de los convocantes concentrados, Miquel Mascaró,
explicó que la concentración se había organizado para tratar de
abrir un debate y crear conciencia entre los trabajadores y los
empresarios para que se tomen medidas que garanticen la seguridad
en el trabajo, especialmente en la construcción. En paralelo,
explicó que vecinos de la zona habían creado una plataforma después
de que el sindicato CCOO anunciara que tenía la intención de
personarse como acusación particular en el proceso judicial que se
sigue como consecuencia del derrumbe del hotel. De esta forma, la
plataforma podrá tener conocimiento de cómo va el proceso judicial
por el desplome del hotel.
Mascaró aseguró que lo sucedido en el Tívoli debe ser un toque
de atención para todos los empresarios y añadió que no se descarta
que se produzcan otras desgracias de este tipo dadas las
condiciones en las que se trabaja en la construcción. Mascaró
añadió además que lo sucedido en el hotel se veía venir y aseguró
que, dos días antes del derrumbe, unos trabajadores se negaron a
embaldosar las plantas del hotel porque no estaban seguros de que
no se produjera una desgracia. «Algunos trabajadores ya habían
avisado de que eso podía suceder», señaló.
En cualquier caso, y a pesar de que se siguen produciendo
accidentes laborales muy graves, Mascaró afirmó que el Govern del
Pacte de Progrés estaba demostrando más sensibilidad para acabar
con los accidentes de trabajo.
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